El acuerdo entre el Presidente Leonel Fernández y el Ingeniero Miguel Vargas Maldonado para eliminar el “nunca más” de la Constitución reduce aún más el espacio político y la capacidad de maniobra al Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) y fortalece el sistema bipartidista.
Se comenta que los reformistas tenían la esperanza de poder “trancar el juego” con sus 20 legisladores, porque ni el PLD ni el PRD de manera separada tenían los votos para pasar cualquier enmienda a la Constitución al no reunir los 140 asambleístas que se requieren.
Los reformistas trataron de sacar provecho con esos 20 votos frente a Fernández y el PLD, porque sumados al PRD no representaban importancia.
Los perredeístas tienen 70 asambleístas y los reformistas 20.
Los peledeístas y perredeístas juntos tienen 190 asambleístas de los 210 que tiene la Asamblea Nacional Revisora que conoce el proyecto de reforma a la Constitución. Ciento cuarenta son los dos tercios para acoger cualquier enmienda a la Carta Sustantiva.
Con esa decisión de Fernández y Vargas Maldonado, consolidan al PLD y al PRD y ratifican como una fuerza minoritaria al PRSC como organización que en las pasadas elecciones no obtuvo el cinco por ciento de los votos que se requieren para ser considerada como fuerza mayoritaria.
Esa alianza entre peledeístas y perredeístas induciría al electorado a decidirse entre esas organizaciones que controlan en forma mayoritaria además del Congreso, los ayuntamientos.
A eso se suma el debilitamiento reformista, que está dividido en varios grupos y que negocian individualmente con el PLD y el PRD porque no le ven futuro a su organización y desconfían de sus autoridades.
El senador del PRSC por La Altagracia pasó al PRD y lo mismo harían otros legisladores de esa bancada. Se informó que al PLD también pasarían algunos congresistas coloraos.
El arquitecto Alejandro Montás, asambleísta del PLD, dijo que favorece cualquier acuerdo de Fernández que sea ratificado por el Comité Político de su organización.
Sostuvo que la concertación y los acuerdos entre los partidos son uno de los fundamentos esenciales de la vida democrática de las naciones.
Fuente:ElNacional